Ricardo
de Orueta y Duarte, historiador, abogado, crítico de Arte y
académico. Nació en Málaga en 1868 y murió en Madrid en 1939, a
los 70 años de edad.
En
la II República, fue nombrado Director general de Bellas Artes:
allí tuvo una decisiva actividad organizadora de los museos y
protectora del arte con su 'Ley del Tesoro Artístico Nacional' de
1933.
Familia
Perteneció
a una familia malagueña de grandes inquietudes y formación
cultural, que tuvo una estrecha relación con Francisco Giner de los
Ríos. Su hermano, Domingo de Orueta, fue un geólogo importante. No
se le conoce descendencia.
Formación
Desde
muy joven manifestó gran interés por el Arte, ingresando a edad
temprana en la Escuela de Bellas Artes de Málaga, formación que
completará en París, donde estuvo nueve años, estudiando
arte, en especial escultura, que sería su campo profesional. Luego
regresó a España para estudiar Derecho en la Universidad de
Granada. Fue una gran políglota.
Institución
Libre de Enseñanza
En
1911 fijó su residencia en Madrid y fue muy afín a la Institución
Libre de Enseñanza, y estuvo vinculado de por vida a la Residencia
de Estudiantes. Conoció directamente a los mejores intelectuales de
las generaciones del 98, y del 27, como José Ortega y Gasset, Juan
Ramón Jiménez y Manuel Azaña.
Investigador
Ricardo
de Orueta fue investigador sobre escultura en las Secciones de
Arqueología y Arte del Centro de Estudios Históricos (CEH).
Dirigió
en dicho centro el Fichero de Arte Antiguo, un fondo tan importante
que está formado por 18.750 placas de vidrio, 8.885 negativos y
positivos en soporte plástico así como casi cinco mil copias en
papel, todos de temática diversa.
Estudió La
escultura funeraria, en algunas regiones peninsulares.
Publicaciones
y divulgación
Escribió
monografías importantes sobre ciertos escultores españoles, como
Pedro de Mena (1914) y sobre todo Berruguete (1917), con interesantes
fotos propias, lo que supuso una acción gráfica pionera en la
crítica del arte en España.
Como
miembro del Centro de Estudios Históricos, Orueta colaboró
activamente en los cursos para extranjeros y cursos de
vacaciones e impartió varias conferencias sobre su especialidad.
Critico
de Arte
Una
etapa de su vida estuvo centrada en su estudio sobre "El arte
cristiano en España", que luego pasó a llamarse “La
escultura española de los siglos XI y XII”.
Política
Durante
la Segunda República, perteneció al Partido Reformista y
estuvo muy vinculado a Manuel Azaña. Fue nombrado Director
General de Bellas Artes en dos ocasiones distintas. Desde ese
cargo se propuso salvaguardar el patrimonio artístico español (que
lo llamó "Tesoro Artístico Nacional"), que había estado
sometido a una sangría importante en la década anterior.
Orueta
impulsó importantes medidas legislativas para preservar las artes y
para el aumento de competencias de Bellas Artes, hasta situarnos al
nivel europeo.
Iniciativas
Impulsó
en 1933 la creación de la Junta de Defensa del Tesoro Artístico
Nacional, y la fundación mediante trasformación de nuevos museos y
sus patronatos, destacando el Museo Nacional de Escultura, de
Valladolid, o el de Aranjuez, el Epigráfico de Barcelona, el
Celtíbero de Soria, el Galdosiano de Santander, el
Histórico Militar de Madrid o el Arqueológico Provincial
de Almería. Y a ello se sumó su apoyo decidido a las
bibliotecas públicas en toda la Península.
Guerra
Civil
Al
estallar la Guerra Civil en 1936 se puso al servicio de la defensa
del patrimonio y como gran conocedor de las Bellas Artes ayudó a esa
salvaguardia ejemplar.
Academias
En
1924 le nombraron miembro de la Academia de Bellas Artes de Madrid,
con un discurso titulado “La expresión de dolor en la escultura
castellana”.
Olvido
Murió
en 1939, y su memoria fue deliberadamente oscurecida durante décadas.
Fondos
El
Archivo Orueta se ha formado a partir de documentos de diferentes
procedencias. Por una parte
la correspondencia de Ricardo Orueta como Director General de Bellas
Artes en los periodos de su mandato, y por otra, la documentación
generada durante su actividad como investigador en el Centro de
Estudios Históricos.
Autor; Feliciano Robles
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